INTERNACIONALES | FÚTBOL FEMENINO | DESIGUALDAD | SALARIOS
La Selección femenina estadounidense es la mejor del mundo disponiendo en sus vitrinas tres mundiales y cuatro torneos olímpicos. En sus filas, se encuentra la mejor jugadora de la historia, Alex Morgan, y gracias a su juego, logró captar a millones de mujeres de su país a la práctica de este deporte. A pesar de los grandes resultados, la brecha con los hombres marca una gran diferencia en este país, donde los jugadores ganan un 40% más.
Por: @Agustinpalmis – @Globalonet.web

En tiempos donde se logró instalar la discusión sobre la desigualdad entre hombres y mujeres en el mundo, el fútbol no es ajeno a esta problemática. El deporte es claro ejemplo del sistema injusto por diversos aspectos, sin distinción de disciplina y resultados.
“Tenemos tres títulos mundiales y cuatro olímpicos y a la selección masculina se le paga más que a nosotras que logramos competiciones importantes”, fueron las declaraciones de Hope Solo, capitana de la Selección de EE.UU. Estos comentarios acerca de la discriminación que sufren llegaron a los pasillos del senado norteamericano y como resultado se aprobó una medida que busca eliminar estas desigualdades salariales con el fin de lograr el respeto y el trato igualitario entre ambos sexos.

Hope Solo
Los equipos nacionales de este país muestran una brecha de sueldos llamativa. Por ejemplo, el pago a cada jugador por un partido amistoso es de U$S5.000 en los hombres, contra U$S3.600 de las mujeres, y en caso de ganar, los primeros obtienen un bonus extra de U$S8.100 frente a U$S1.350.
Además, el pago anual a los jugadores que se mantienen en el seleccionado masculino es de U$S100 mil contra U$S72 mil, y en caso de lograr un título, la cláusula extra es de U$S260 mil para los hombres frente a U$S100 mil.
En lo que respecta a copas mundiales, el seleccionado masculino no logró nunca un título y tampoco la clasificación al mundial de Rusia. Distinta es la historia de las mujeres quienes lograron tres. Aunque los presentes deportivos son desiguales, también lo son en los pagos, donde los hombres pueden llegar a ganar hasta U$S400 mil en un mundial contra U$S75 mil.
Estas diferencias no solo suceden en Latinoamérica y en Estados Unidos. Europa también padece de esta problemática. En España, las entradas a los partidos de mujeres son gratis, mientras que un partido de la máxima categoría de aquel país es de EUR50.
Con respecto a otros países, las jugadoras de la liga danesa realizaron un paro con el fin de lograr igualdad en salarios mientras que Noruega, fue el primero en establecer la paridad entre los sueldos de hombres y mujeres.
Agustín Palmisciano.