María Florencia Chiribelo “En mis comienzos, el arco de 11 me parecía un monoambiente”

Con 36 años, es la arquera, capitana y referente del equipo de fútbol femenino de River, desde 2015. Llegó a participar de dos ediciones de copa Libertadores, y hoy juega su tercer torneo local como profesional, donde tiene la valla menos vencida con apenas un gol en contra en seis partidos, y dice: “Estamos para pelear siempre en lo más alto de la tabla”.

Florencia cuenta que siempre le gustaron los deportes, pero el camino a ser jugadora profesional se dio de grande: “Arranqué de grande, a los 27 años y en fútbol cinco en un torneo amateur de Gambeta Femenina, me preguntaron si quería ser arquera y así empecé”, recuerda.

Su vida, tiene un collage de actividades que utilizan al deporte como un salvavidas muy lejano a las fortunas de otras tierras. Además del fútbol, tiene su trabajo y estudios, y llegó a pedir una licencia de vacaciones para poder participar de la copa Libertadores de 2017, en Paraguay.

Por: @mflorenciarincon@Globalonet.web


El primer club de fútbol 11 donde fue a probarse, influenciada por amigas, fue Fénix, en 2012. En esa época entrenaban en el club Comunicaciones porque, en ese momento, el club no tenía fútbol femenino. La DT, Patricia Luna, después de verla bajo los tres palos, le dijo que se quede a jugar, pero “Chiri”, como la llaman sus amigos, no se sentía tan bien en un arco tan grande, “Un arco de fútbol 11 es como un departamento de un ambiente”, pensó en ese momento y prefirió seguir con el fútbol cinco. Pero rápidamente tuvo su revancha, porque la misma entrenadora se fue a Ferro y la convocó. Jugó un torneo en el año 2013, donde tuvo que jugar contra equipos como Boca, River y UAI Urquiza, que tenían una preparación mucho más fuerte, entonces vivió goleadas importantes, como un 13 a 0 contra la UAI por la fecha 12.

Mientras atajaba en Ferro, una conocida la puso en contacto con Diego Guacci, quien era entrenador de River, hoy técnico de la sub-17 y sub-15 de la selección argentina: “Me fui a probar y a Diego le gustó lo poco que hacía en ese momento, ya hace seis años que estoy en el club”, recuerda.

En 2017 tuvo una destacada participación en la Copa Libertadores. En lo personal lo recuerda como su mejor momento, y también en lo grupal, donde el equipo salió tercero. “Fue una experiencia increíble pararte en una cancha y escuchar el himno, representar a tu país, se me caían las lágrimas”, concluyó la futbolista, que además atajó un penal en la serie definitoria por un lugar en el podio frente a las locales de Cerro Porteño.

Más allá del fútbol, ella desarrolla su vida profesional y se capacita para crecer y tener más herramientas en un futuro. Está avanzada en la carrera de Licenciatura en Seguridad Pública.

Luego de cinco años de titularidad y siendo capitana, la referente del equipo millonario tuvo que ver desde el banco de suplentes la final contra Boca en el último torneo: “El entrenador decidió que juegue Brenda Molinas, son cosas que no te esperás pero son parte del fútbol”, dice. Además, la arquera venía de atajar un penal clave en la semifinal, frente a UAI Urquiza. Finalmente recuperó el arco a base de entrenamiento y profesionalismo, y aunque nunca habló del tema con el entrenador, respetó su decisión y recuerda cómo se tomó ese tiempo: “Seguí entrenando con un solo objetivo; volver a ser titular, y pude lograrlo”, recuerda Florencia quien también atajó en la última edición de copa Libertadores, donde su equipo quedó eliminado por 1 a 0, contra Ferroviaria, campeonas del certamen.

¿Qué concluís de la performance de River en la copa libertadores?

Si no entendés la historia y no conocés un poco del fútbol femenino es difícil de poner en contexto. Nos fuimos en cuartos contra Ferroviaria un equipo fuerte, sin saber que iba a ser campeón. Perdimos 1 a 0. Fue el único gol que nos metieron en el torneo y nos sacó de la competencia. El balance fue muy bueno, terminamos primeras en el grupo. Le ganamos al rival más difícil de la zona, Independiente de Santa Fe, que es igual o más difícil que Ferroviaria. Contra las brasileras buscamos el partido todo el tiempo, la idea no era empatar e ir a penales. Veníamos golpeadas por la final contra Boca, pudimos tener algo de temor de que no te salgan las cosas, ya que la Copa Libertadores es muy corta y pasa muy rápido, pero pudimos hacer lo que teníamos que hacer. Ferroviaria convirtió de una pelota parada, fue justo que ellas pasen, porque también buscaron el partido. Fueron muy parejos los dos equipos. No hubo muchas situaciones de gol en el partido para ninguno.

Sos actualmente la arquera con la valla menos vencida del torneo, casi todos los partidos terminan con el arco en cero ¿A qué se debe?

Desde que comenzó la Copa Libertadores a hoy, mi objetivo es mantener el arco en cero. Y poder estar para cuando el equipo me necesite. Si bien el objetivo del arco en cero es grupal, para mí es personal. Estoy muy metida en lo que estoy haciendo, muy comprometida en los entrenamientos. Si bien siempre fui muy autoexigente, cuando te dicen sentate un rato en el banco, algo te moviliza. No quiero que me metan goles y no quiero dar ni un centímetro de lugar.

¿Qué es lo mejor que te dio el fútbol?

Mí logro más importante, sin duda fue haber salido campeona del torneo 2016/2017, lo cual a su vez nos permitió disputar la Copa Libertadores 2017, en la cual obtuvimos el tercer puesto. Fue el 21 de octubre de 2017, donde River le ganó 2 a 1 a Cerro Porteño en Asunción en el Estadio Arsenio Erico.

¿Como ves tu futuro? 

A veces tengo ganas de hacer otras cosas y no tengo tiempo de hacerlas porque el fútbol me lleva muchísimo tiempo. El cuerpo te hace sentir que estás grande, los golpes duelen más y las lesiones duran más. Pero hoy me siento muy bien físicamente, estoy muy motivada y metida con objetivos claros, haciendo lo que tengo que hacer y estoy respondiendo al nivel que tengo que responder. Entonces se hace difícil mirar a un costado y decir hasta acá. No sé cuándo me retiraré, a veces lo veo cercano y a veces no, voy a ir viendo cómo se va dando.

Sueño de selección

Chiribelo, referente del equipo millonario quiere cerrar su etapa como futbolista en el club millonario, pero también sabe que pueden surgir cosas, a veces imprevistas. Una de ellas no fue a nivel clubes, sino un llamado muy especial para formar parte de la preselección argentina en 2016: “Fue hace un montón, tenía 31 años, fue increíble. Teniendo en cuenta mis inicios en el fútbol, fue muy importante y motivador. Fui muy feliz. De haber sido observada y entrenar en el predio de Ezeiza”, recuerda
Fotografía de archivo: Florencia en su paso por la preselección de Argentina

Florencia Rincón.